La gastronomía francesa es famosa por su riqueza y diversidad y, a lo largo de su historia, ha influido en la creación de platos que, hoy en día, son populares en todo el mundo.
Desde los croissants hasta los macarons, la cocina francesa ha inspirado a chefs y cocineros de todas partes del globo.
¡Acompáñanos a explorar la influencia de la gastronomía francesa y a conocer los platos franceses que se han popularizado internacionalmente!
La Historia de la gastronomía francesa en la cocina global
La cocina francesa moderna tiene sus orígenes en los cambios que se produjeron en el país a nivel gastronómico, económico e industrial tras la Revolución Francesa. A partir de entonces, y sumadas las innovaciones que se introdujeron más tarde, durante el siglo XIX, Francia ha terminado exportando sus recetas y sus chefs a lo largo y ancho del mundo, adaptándose a las culturas locales y fusionándose con otras tradiciones culinarias para crear una auténtica cocina global.
- La expansión de la cocina francesa en el siglo XIX
Fue durante el siglo XIX cuando la expansión de la cocina francesa vivió su época dorada. Aunque ya antes, a finales del siglo XVIII, durante la Revolución Francesa, la gastronomía y la industria alimentaria habían experimentado profundos y definitivos cambios, serían las décadas a partir de 1850 las que verían a los chefs franceses triunfar por todo el mundo y llevar a la cocina francesa a un nivel global. Los menús modernos, las brigades de cuisine, el uso magistral de salsas y hierbas aromáticas, la importancia de los postres… ¡Son todos aportaciones francesas!
- La influencia de la cocina francesa en la creación de platos internacionales
La influencia de la cocina francesa en la gastronomía internacional actual es innegable, con platos como la crème brûlée o los infinitos tipos de quiche asentados en menús de todo el mundo. ¡Los platos internacionales franceses han conquistado paladares por todo el globo, veamos algunos de ellos!
5 platos que se han popularizado en todo el mundo gracias a la gastronomía francesa
1. Croissants
El origen del croissant, una deliciosa masa hojaldrada y fermentada, podría hallarse en el kifli austríaco, popularizado en Viena tras el fracaso de un asedio otomano a finales del siglo XVII. Sin embargo, sabemos que estos pastelillos con forma de media luna curva eran habituales en Turquía desde tiempo inmemorial y, quizás, fue el propio ejército otomano quien los llevó a Europa durante sus campañas.
Sin embargo, sería en la Francia de finales del siglo XIX y principios del XX donde el kifli se transformaría en el delicioso croissant que conocemos y amamos hoy en día y que es una de las mayores aportaciones de la panadería francesa al mundo. ¡Por no mencionar que es el desayuno francés perfecto!
2. Baguettes
La historia de la baguette, de nuevo, tiene sus raíces en Viena aunque, en esta ocasión, en los panes que comenzaron a cocerse en los hornos modernos a vapor de esta ciudad austríaca a mediados del siglo XIX.
Muy pronto, los panaderos franceses adoptaron y mejoraron la técnica vienesa, comenzando a cocer panes en forma de barras pequeñas y muy alargadas (baguette significa precisamente barra o varilla pequeña) que tenían una corteza muy crujiente y una miga esponjosa y agujerada, producida gracias a un amasado especial.
Hoy en día, la baguette es el pan francés por excelencia, siendo un desayuno muy habitual en este país el tomar una de estas piezas de pan untada con mantequilla, mermelada, miel, quesos o patés. ¡Otro gran aporte de la panadería francesa internacional!
3. Quiche
La quiche Lorraine es una tarta salada francesa elaborada con masa brisa que lleva un relleno de crema de leche fresca y huevos batidos llamado migaine. Originalmente estos eran los únicos ingredientes de este platillo de la Lorena, pero en el siglo XIX se le añadieron las clásicas tiras de panceta que conforman la receta actual.
Hoy en día, la quiche Lorraine y sus decenas de variantes han conquistado el mundo y es uno de los platos franceses para bruch más solicitados en los restaurantes.
4. Crème Brûlée
La crème brûlée es el postre francés por excelencia. La receta de la crème brûlée, cuyo origen se haya en el siglo XVII, consiste en una crema hecha con leche, azúcar y yemas de huevo, aromatizada con vainilla o con canela y limón. Una vez horneada, como toque final se espolvorea con azúcar y se carameliza con una fuente de calor para crearle su típica cobertura crujiente de caramelo.
¡Es uno de los postres franceses más populares y, actualmente, se come en todo el mundo!
5. Macarons
Los macarons son uno de los grandes hitos de la repostería francesa. La historia de los macarons es mucho más antigua de lo que pudiera parecer viendo su aspecto delicado, puesto que sus orígenes se hallan en el monasterio de Cormery durante el siglo VIII.
Los macarons actuales son mucho más refinados que los medievales y, desde la década de 1930, consisten en dos discos de merengue de almendra rellenos de crema de mantequilla, ganache o mermelada, como si fuera un pequeño sándwich dulce. ¡Son otro de los postres franceses internacionales más consumidos en todo el mundo!
La influencia de la gastronomía francesa en la cocina moderna
La cocina francesa ha influido en la creación de muchos platos modernos exitosos y ha sido, desde su renovación y refinamiento a mediados del siglo XIX, fuente de inspiración para chefs de todo el mundo. Además, la cocina francesa se ha fusionado con otras tradiciones culinarias, creando una cocina global única, al tiempo que diversa.
La fusión de la cocina francesa con otras culturas
La cocina francesa moderna ha ido realizando, poco a poco, y desde su época dorada a finales del siglo XIX y principios del XX, un ejercicio muy inteligente de fusión gastronómica con las cocinas de los países del mundo que ha ido conquistando cultural y gastronómicamente.
La influencia de la cocina francesa en otras culturas puede advertirse tanto la homogeneización de los menús, los servicios de mesa y el trabajo de las cocinas, como en las técnicas culinarias, las recetas y los productos nacionales que han viajado por todo el mundo.
La innovación en la cocina francesa
La actual innovación en la cocina francesa puede contemplarse a través de toda la serie de nuevas recetas y técnicas culinarias que han ido inundando los locales de alta cocina en las últimas décadas.
Hoy en día, chefs de restaurantes de alta cocina de lugares tan distantes como Japón, Finlandia, Argentina o Estados Unidos pueden trabajar juntos e innovar gastronómicamente gracias a las pautas y protocolos inventados por la cocina francesa a la largo de su historia.
Restaurantes de cocina fusión.
Los restaurantes de cocina fusión combinan tradiciones culinarias, técnicas e ingredientes de diferentes culturas del mundo y los ofrecen al comensal de forma original e innovadora.
Si te apetece probar algún restaurante francés de cocina fusión en París, prueba con:
Preguntas frecuentes
Aunque es imposible destacar un solo plato francés por encima del resto, se podría considerar que uno de los más populares a nivel mundial es el croissant.
¡Sí! Aunque el origen del croissant está ligado a Austria y al Imperio Otomano, fue en Francia donde este delicioso manjar se perfeccionó y se hizo famoso en todo el mundo. ¡Un verdadero clásico del desayuno!
Las baguettes no solo son deliciosas, también son parte de la vida diaria en Francia y uno de los desayunos más populares del país. Es común ver a la gente caminando con una baguette bajo el brazo, recién salida del horno. ¡Saben mejor cuando están crujientes!
Aunque la quiche es originaria de Francia, se ha adaptado en muchas cocinas alrededor del mundo. Puedes encontrar versiones con ingredientes locales en casi cualquier país, ¡pero la quiche lorraine sigue siendo la reina!
El truco está en el contraste entre la crema suave y la capa de azúcar caramelizado crujiente. Cada bocado combina lo mejor de dos texturas, lo que hace que este postre francés sea irresistible.
Al estar elaborados con merengues, los macarons pueden ser un desafío, ¡pero no son imposibles de elaborar! Con práctica y paciencia, puedes lograr que queden tan perfectos como los de las pastelerías francesas.